Irán, una ruta por la antigua Persia 26. Después de bastante tiempo sin escribir nada por aquí, otros trabajos me han mantenido mas ocupado, retomamos nuestro viaje por Irán. De camino a la calurosa Persepolis, nos detenemos en la antigua necrópolis de Naqhs-e-Rostam. En un enorme farallón de roca se encuentran las tumbas de los reyes aqueménidas y sasánidas.

El lugar es grandioso y merece la pena visitarlo a primera hora de la mañana cuando la luz es lateral y acentúa los bajorrelieves tallados en las rocas. Las tumbas tiene forma de cruz y miden casi 25 metros de ancho por 18 de Alto.

Tuvimos el placer de contactar con unos agricultores que estaban recogiendo tomates. Por supuesto, como en todo Iran, nos fuimos con unos cuantos tomates de regalo.

La idea era llegar a Persépolis cuanto antes, para evitar el calor y al tío del mazo que anda por allí.