Santuario de Loiola. La Basilica. A las afueras de Azpeitia y de camino a a la vecina Azkoitia se levanta el Santuario de Loiola. Erigida en homenaje a San Ignacio de Loiola, que fue el fundador de la Compañía de Jesus, destaca por su planta circular y su esbelta cúpula. La entrada se realiza a través de un amplio pórtico de tres vanos. De donde se mire, el exterior de la basílica muestra una simetría perfecta.
La puerta de entrada principal, de madera, de un tamaño significante, da entrada a un interior en el que predomina el estilo churrigeresco. Mármol y sobre todo mucho dorado son loa materiales predominantes en el conjunto. Su planta circular, desde la que levanta su maravillosa cúpula, alberga varias capillas y el coro con su órgano que quedan justo encima del portón de entrada sobre.
La cúpula es una obra de arte. No hay visitante de la basílica que no tuerza el cuello y levante la vista a esa proeza de la arquitectura. Merece la pena dedicar una mañana a visitar todo el complejo.
